Debería ser al contrario, pues un patio interior en buenas condiciones, es beneficioso para los usuarios del propio edificio. Las personas que habitan las estancias adyacentes a los patios de comunidad, pueden beneficiarse muy especialmente de tareas con las que consiguen, entre otras ventajas, mejores vistas y mejor calida de luz en el interior de los inmuebles.
Para realizar trabajos de rehabilitación en patios de comunidad, pueden emplearse los trabajos verticales. En este caso, no son necesarios montajes de andamios, ni utilización de elevadores que además de caros no resultan prácticos para acceder a diversas zonas complejas de los edificios.
En cuanto a los patios de luces, debe proporcionarse una rehabilitación desde el primer paso hasta el último. Se llevan a cabo reparación de grietas, de fisuras, de manchas de humedad, desconchones... Solo así quedarán los muros perfectos para la aplicación de pintura o de productos específicos con los que se evitará la aparición de moho y la degradación de los paramentos.
La aplicación de pintura blanca hace los patios de comunidad luzcan de una manera más agradable a la vista. Además de ello, proporcionan una óptima iluminación interior a las estancias que dan al patio. Estas habitaciones habitualmente carecen de sol directo, pero no por ello deben renunciar a luminosidad natural. Para conseguirla, nada mejor que llevar a cabo aplicación de pintura, enlucidos y blanqueados en muros pertenecientes a los patios de comunidad.
